Bomberos de Protección Civil de Tula atendieron el reporte de alerta de los vecinos cercanos a la zona donde está una capilla.
En la calle Magoni, en un lote baldío se encontraba estacionado el camión color naranja, que fue consumido por las llamas, el cual estaba cargado con grava.
Tras controlar el fuego, no se presentó alguna persona que dijera ser la propietaria del camión.
Fue necesario el trabajo de tres unidades automotoras y de los bomberos para controlar el incendio, además de la presencia de personal de Seguridad Pública municipal para resguardar el lugar.